Una vez más me pregunto cómo es que en la espera
uno vuelca toda su alma y existencia
sobre una línea tan inestable
como es la línea telefónica*.
* Válido también para la línea de correos
Genial
ResponderBorrar¡¡¡Porque de esa manera podemos culpar a la empresa telefónica y no al fulano que nunca llamó!!!!
ResponderBorrarTodavía recuerdo aquella vieja excusa, cuando los mensajes escritos llegaban todavía de mano del cartero:
- ¿Cómo? ¿No lo recibiste? ¡Qué mal anda el correo!
Pero ahora si que no hay excusa porque además del fijo está el celular y está el facebook y el e- mail.
ResponderBorrarUna época en la que ya no hay excusas.
ResponderBorrarSi no apareces es porque no quieres.